Dicen que del amor al odio hay un paso y a juzgar por el sorprendente cambio que se produjo en mi relación con este color, es cierto pero a la inversa. He pasado de odiarlo a adorarlo.
En realidad si me pongo a recordar, creo que todo comenzó hace como cosa de tres años cuando Mercedes Cayado de Para Verte Mejor, tras hacerme un estudio del color, me abrió los ojos y me dijo que uno de los tonos que más me favorecía era el rosa fucsia. Fue como un jarro de agua fría. Era sin duda uno de esos colores que no entraban para nada en la, quizás escasa por aquél entonces, variedad de tonalidades de mi armario… Siempre me han encantado los colores neutros y he de confesar que antes de aquello, alguna amiga (ejem… Helen) me había sugerido que el caramelo NO era mi color…
Decidí probar… pero el fucsia no terminaba de convencerme así que busqué una alternativa. El color fresa o frambuesa, el favorito de mi cuñada Eva, era una opción muy agradable para mi vista, así que me dije que a la siguiente boda que tuviese iría vestida de ese color.
Y así, enterita de color fresa, me planté en la boda de mi amiga Ana. Más adelante os contaré un poco más sobre este diseño…
Poco después, me surgió la oportunidad de tener una pequeñita colección de ropa vintage en la tienda que contaba con este vestido… fue amor a primera vista y era rosa chicle, y sin más, me lo quedé.
A partir de ese momento parte de mí comenzó a pensar en ese color.
Y diseñé una chaqueta oversize en rosa chicle, mezclada con una solapa de tul blanco y lunares en terciopelo negro. Blazer que ahora es propiedad de mi amiga y profesora Celia, que a pesar de que cada día está más guapa y estilosa con su nuevo corte de pelo, no deja que le tome una instantánea con su #chaquetapolet para los archivos de la marca… Ya os hablaré de estas otras dos obsesiones, los lunares y las chaquetas.
E imaginé, que si algún día tenía mi propia casa de campo, querría que tuviese una preciosa puerta rosa chicle en la entrada.
Demasiado cantoso, lo sé… pero una puerta que se comunique con un jardín de ensueño… esa idea no me la quita nadie.
Pero y a mi qué más me da que sea más o menos cantoso???? A mi, me gusta en la entrada!!!
O por qué no, teñirme el pelo de rosa chicle. Esta tendencia de teñirse el pelo de colores insospechados viene pisando fuerte desde hace una par de veranos. Siempre me encantó la mítica peluca que comparten Scarlett Johansson y Natalie Portman en “Lost in Translation” y “Closer” respectivamente. Me han dicho que se consigue el efecto con un spray y que se va con los lavados. También hay unas tizas para el pelo que se llaman Hair Chalk que son fáciles de utilizar. La marca L´oreal las tiene. Me animaría si fuera rubia, pero con mi color de pelo y mis cejas súper negras es más que probable que quedase hecha un cuadro. Aún así, siempre me quedará la opción de la peluca para alguna despedida de soltera!!!
Y por supuesto, no podía faltar en nuestro lookbook SS 2105 de Paula Jolan. Gracias Julia por conseguir siempre a la perfección las tonalidades deseadas. Eres una crack!!!
Nada como hacer de ese color el protagonista de tu look en tus zapatos…
En nuestra tienda online tienes disponibles estas preciosas bailarinas de ante combinadas con glitter. Y además, rebajadas.
O en tu esmalte de uñas…
Y puestos a soñar… pinta de rosa tus vacaciones de verano, esas en las que das rienda suelta a tu yo más hippie y aventurero… en las que viajas en furgoneta y pasas las noches en un motel típicamente yankee mientras descubres la ruta que siempre quisiste hacer… la 66… o la que sea… eso lo deciden tus sueños!!!
Me encanta el post!!
La chaqueta oversize con solapas de lunares donde la puedo comprar?
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